Nuestro alumnado de Latín ha vivido una experiencia única: viajar al pasado para encontrarse cara a cara con los mitos y héroes de la Antigüedad. Y no, no ha hecho falta una máquina del tiempo. Gracias al Festival de Teatro Grecolatino, nuestros alumnos y alumnas han asistido a una representación de La Ilíada en el emblemático Teatro Romano de Sagunto. Si te apasiona la cultura clásica y crees que el teatro puede ser una puerta al conocimiento, este post te interesa.
Aprendiendo Latín… desde las gradas
Estudiar Latín va mucho más allá de memorizar declinaciones. Esta salida educativa ha sido una oportunidad para vivir la literatura de forma directa, como lo hacían los antiguos griegos y romanos. Los alumnos han podido observar cómo los personajes de La Ilíada cobraban vida sobre el escenario, con una puesta en escena que mezclaba respeto por el texto original con un enfoque dinámico y muy visual.
Ver, escuchar y sentir los versos en un entorno histórico como el Teatro Romano ha facilitado una comprensión más profunda del contexto cultural y literario de las obras clásicas.
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Sagunto: un escenario con historia
La visita ha tenido lugar en uno de los enclaves más simbólicos del patrimonio romano en España: el Teatro Romano de Sagunto. Este espacio, construido hace más de dos mil años, se convirtió por un día en aula abierta, permitiendo que los alumnos y alumnas aprendieran de forma diferente.
El poder del teatro como herramienta didáctica
Apostar por este tipo de actividades refuerza la educación experiencial: los alumnos y alumnas no solo aprenden, sino que viven lo que estudian. Y eso marca la diferencia. La emoción, la sorpresa y la belleza del teatro son elementos que potencian la memoria, estimulan la curiosidad y despiertan el pensamiento crítico.
Además, este tipo de experiencias fomenta la convivencia, el respeto y la sensibilidad artística.
Reflexión y aprendizaje compartido
Tras la representación, el grupo participó en un breve coloquio, donde comentaron la obra y compartieron impresiones. Una forma muy enriquecedora de cerrar el círculo: del aula al escenario y del escenario a la reflexión.
En el Colegio Los Naranjos creemos que la mejor forma de aprender es viviendo.
