Nuestro viaje de esquí a Espot ha sido todo un éxito. Los alumnos y profesores de 3º a 6º viajaron en nuestro autobús escolar hasta el destino donde convivieron, disfrutaron de los paisajes nevados y realizaron un montón de deporte durante la estancia.
¿Cómo ha sido nuestro día a día? Los alumnos se levantaban temprano para desayunar, coger fuerzas y a continuación dirigirse a las pistas de esquí, ubicadas muy cerca del hotel. A lo largo de la mañana junto con los monitores perfeccionaban su técnica de esquí y una vez terminadas las clases contaban con tiempo libre para acabar de practicar lo aprendido. De igual modo, cuando acababan de comer repetíamos rutina, clases con nuestros fantásticos monitores de la escuela de esquí y un pequeño tiempo libre.
Pero las tardes no acababan aquí, de vuelta al hotel nuestros maestros acompañantes nos habían preparado diferentes actividades como juegos o dinámicas grupales en las que la cohesión grupal, el trabajo en equipo y el compañerismo eran los grandes protagonistas. Poder disfrutar de la nieve ha sido maravilloso. Los trineos, aprender a subir en telesillas, hacer muñecos de nieve o bien empezar una guerra de bolas de nieve no son actividades de nuestro día a día, por esta razón, la oportunidad de poderlas disfrutar nos ha parecido toda una gran aventura para el recuerdo.
Por las noches, los alumnos disfrutaron de cenas y actividades adicionales como ir a la discoteca del hotel, celebrar una fiesta de disfraces o bien jugar a diferentes juegos.
A pesar de tener un horario muy completo y repleto de actividades y momentos de convivencia, nuestros chicos y chicas han sido capaces de aguantar los madrugones
a lo largo de la semana y volver a las pistas cada mañana con más fuerza y ganas que la anterior.
¡Están hechos todos y todas unos grandes esquiadores!
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